martes, 23 de diciembre de 2008

¿Qué es el catalanismo?


Hace ya tiempo fui a una pequeña exposición gratuita sobre el trabajo de Gervasio Sánchez, un periodista de los que pocos quedan.

En concreto sobre su trabajo en Sierra Leona con respecto a los niños soldado y a todo el clima de guerra y posguerra.

Lecciones muy duras sobre la vida en aquellos lugares donde por estar en el lugar inadecuado en el momento inadecuado ya nunca más volverás a tener brazos. O dónde por el mismo capricho del azar a los 12 años te vas a convertir en un drogadicto caníbal que asesinó a sus padres. No es rimbombante ni exagerado, esto es así sin más y el que quiera saber más que se informe sobre éste hombre y su trabajo.

La exposición en algún lugar de Gracia estaba compartida con otra exposición con el triple de despliegue logístico. Sobre los no sé cuantos años que hacía de que el señor tarradellas dijo aquello de ciutadans de catalunya ja sóc aqui.

Mil veces más importante, donde vas a parar.

Y yo estaba intentando escuchar el documental que habían puesto en la única y pequeña sala en la que seguíamos hablando del mundo y no de nuestro ombligo y de al lado, con un sonido demasiado potente, nos llegaba la frasecita....

ciutadans de catalunya, ja sóc aqui

ciutadans de catalunya, ja sóc aqui

ciutadans de calunya, ja sóc aqui


y ovaciones.. y aplausos

guau, ahí sí que manejaban realidades duras e ideas complejas, yo no me atreví a entrar.

y ovaciones.. y aplausos

sábado, 6 de diciembre de 2008

Fíjense en estos dos

"Fíjense en estos dos. Su discusión no va a cambiar nada, no conducirá a decisión alguna, no influirá en la marcha de las cosas, es completamente estéril, inútil, destinada únicamente a este bar y su aire viciado, junto con el cual abandonará el local en cuanto las señoras de la limpieza abran las ventanas. ¡Y sin embargo fíjense en lo atento que está el reducido público que rodea las mesas! Todos guardan silencio y los escuchan, se han olvidado hasta de tomarse el café. Lo único que ahora les importa a ambos contendientes es cuál de ellos será reconocido por esta pequeña opinión pública como poseedor de la verdad, porque ser reconocido como aquel que no posee la verdad significa para cada uno de ellos lo mismo que perder el honor. O perder una parcela del propio yo. En sí, la opinión que sostienen no les importa tanto. Pero como convirtieron una vez esa opinión en atributo de su yo, cualquiera que lo toque será como si clavara algo en su propio cuerpo."

Milan Kundera. "La inmortalidad"